jueves, 29 de octubre de 2009

El gorrión

Así me he quedado cuando he visto este vídeo que me ha hecho llegar el jefe - gracias, papi. Por si alguien no entiende el inglés, el padre le va repitiendo al hijo la misma pregunta ("¿qué es?"), y el hijo le responde a cada vez lo mismo, que es un gorrión, y a cada vez con peores formas.

Luego, el hijo lee en voz alta el diario del padre, escrito hace muchos años y que dice así: “Hoy estaba sentado en el parque junto a mi hijo pequeño, que hace unos días cumplió tres años. Hasta 21 veces me preguntó mi hijo qué era aquel pájaro que se posaba delante de nosotros, y las 21 veces le expliqué que era un gorrión. Cada vez que me hacía la misma pregunta, le respondía lo mismo, y sin impacientarme le abrazaba con cariño para hacerle saber todo el amor que le profesaba."






Dedicado a mis padres. Dedicado a todos los padres.

Dedicado a todos los que somos padres y tenemos la suerte de que nuestros padres sigan en este mundo, dándonos así la oportunidad de hacerles saber el amor que les profesamos.

Que tengáis un buen día.

martes, 27 de octubre de 2009

Imagino...




Imagino que los que leemos estas líneas podemos convenir que los que sueñan de día tienen conocimiento de muchas cosas que se escapan a los que solamente sueñan de noche.

Imagino también que nos costará ponernos de acuerdo en una definición de poesía, y algo menos en sus efectos – nos ocurre lo mismo que con el enamoramiento, que lo definimos a través de sus síntomas, como si fuera una enfermedad – nada nuevo por otro lado, hay millones de canciones que hablan de ello, viene a mi cabeza una en particular (...Touch if you will my stomach / Feel how it trembles inside / You've got the butterflies all tied up / Don't make me chase you / Even doves have pride…).

Imagino que todos estamos de acuerdo en que este poema tan conocido de Neruda, que todos hemos recitado alguna vez a solas y otra vez como mínimo a un ser especial, roza la perfección.

XX

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: «La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos.»

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.


Imagino que también podemos convenir que la poesía puede tener formas diferentes al poema, que van desde una mirada hasta una canción, por ejemplo–






Imagino que estoy recostado contra la borda de la barca, y en mi hombro la cabeza de un ser querido, compartiendo la visión de lo que se ve en la foto. Ya falta menos de diez años para eso. Como decía aquél: pasadlo bien, que la vida es corta y la noche es larga.

Soy feliz. Que tengáis un buen día.

jueves, 22 de octubre de 2009

¿Quién me abre la puerta?



Leo hoy en el diario de ayer que Ray Bradbury (el autor de las Crónicas Marcianas), a preguntas sobre los libros electrónicos, decía no hace mucho lo siguiente: "Eso no son libros. Los libros sólo tienen dos olores: el olor a nuevo, que es bueno, y el olor a libro usado, que es todavía mejor"

Bravo por don Ray. Cuando teníamos veinte años, nos gustaba repetir una frase que viene a decir lo mismo, aunque de una manera algo más basta, debo reconocerlo: hacerse pajas está bien, pero follando conoces gente -- el autor era (creo) Bartolo, y, claro, una vez dicha provocabas sonrisas -- y el resto ya era cosa tuya. Nos pasábamos los días y las noches en nuestra particular búsqueda de lo evidente, y, enfin, qué os voy a contar que no sepáis los cuatro gatos lastimados y relamidos que léeis este post.

Por aquel entonces, los Guns N' Roses sacaban un disco que hoy es parte de la historia de la música, mi hermana preferida hacía COU y lo trajo a casa. Durante meses, día sí día tanbién, esta canción sonó en el K7 del aquel corsa rojo con vocación de Cadillac Solitario:





Unos (bastantes) años más tarde, encontré a la mujer de mi vida, que hoy sigue a mi lado y es mi particular Diosa - no lo dudéis, yo no seré como los mártires del protocristianismo, si tengo que elegir entre mi fe (cuando la tenga) y mis seres queridos, va a ser que ganan los segundos y le dan morcillas al mundo y a su presunto creador.

Después aprendí a respirar, a relativizar, a no morir. Más tarde aprendí que robar es el único pecado, y que los demás son simplemente variaciones de robar - cuando matas a un hombre, le robas a alguien el derecho a una vida, a sus hijos de venir al mundo, o si ya están aquí, el derecho de tener padre; cuando dices una mentira, le robas a alguien el derecho a la verdad, etc.

Luego tuvimos dos hijos, y aprendí que solamente hay que temer a las jaulas, y que lo único que no podemos consentir, so pena de convertirnos en muertos vivientes y de ver como los jetos se nos desfiguran y desdibujan cada día más cuando nos miramos al espejo cada mañana, es que que nuestros sueños y nuestras opciones de vida cedan ante los barrotes (aunque sean de oro macizo), o ante el recuerdo, o ante el el cansancio, o ante el deseo.

Después escribí:-

Sabed que no todas las lágrimas son amargas,
y llorad sin miedo, hasta que no os quede dentro
ni una sola lágrima de las negras.


Hoy busco una salida al sinsentido de vivir en un mundo absurdo que complemente la más evidente; incluso cuando tienes los huevos de darle una patada a la puerta - por ejemplo -.


L'obscurité des eaux - Alejandra Pizarnik

Escucho resonar el agua que cae en mi sueño.
Las palabras caen como el agua yo caigo. Dibujo
en mis ojos la forma de mis ojos, nado en mis
aguas, me digo mis silencios. Toda la noche
espero que mi lenguaje logre configurarme. Y
pienso en el viento que viene a mí, permanece
en mí. Toda la noche he caminado bajo la lluvia
desconocida. A mí me han dado un silencio
pleno de formas y visiones (dices). Y corres desolada
como el único pájaro en el viento.



No dejo de preguntarme: ¿quién me abre la puerta?

Que tengáis un buen día.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Valor, esperanza y desasosiego



Leo (en pijama, calentito y en casa, tras haber cenado como un marqués y mientras suena en un equipo de música que vale una pasta un vinilo que me ha costado otra pasta) una entrevista publicada en la sección "La Contra" de La Vanguardia de ayer el siguente diálogo entre Ima Sanchís y el señor de la foto, que resulta ser un ex presidente de MSF que lleva por nombre James Orbinski (entrevista completa en http://www.lavanguardia.es/lacontra.html)

...()...

P: ¿Su gran pregunta?

R: En los últimos veinte años he luchado para averiguar cómo responder al sufrimiento ajeno.

P: ¿Y ha averiguado cómo?

R: Lo primero que necesitamos son unos ojos dispuestos a ver el sufrimiento ajeno, y luego la decisión de responder a él con los medios de que dispongas, puede ser algo tan sencillo como ayudar a tu vecino o algo tan complicado como ser médico humanitario. Pero lo importante es estar abierto.

P: Entiendo, lo importante es la actitud.

R: Sí, el deseo de relacionarse con los demás. Si estás abierto, no eres ajeno al sufrimiento de los otros.


P: ... Y aterrizó en Baidoa, la ciudad de la muerte, en Ruanda.

R: ¿Qué aprendió?

R: Todo lo malos que podemos ser. ...()... Estaba conmocionado y prácticamente destruido. El olor, el tacto, la vista..., todos mis sentidos estaban saturados por la realidad del genocidio. Es la más penetrante de las experiencias humanas.

P: ¿Cuál es la situación más esperanzadora que ha vivido?

R: Durante el genocidio de Ruanda estaba suturando a una mujer que había sido violada y a la que habían mutilado con un machete.

P: ¿Los pechos?

R: Sí, una práctica habitual. Ese día había cientos de pacientes en la calle. Y ahí mismo, frente al hospital, hacíamos cirugía. La mujer se estaba desangrando y sufría unos dolores terribles. Con los fórceps le pinché la piel y le hice daño, entonces me tocó el brazo, la miré y topé con sus ojos.
...
Sentí su dolor, lo comprendí dentro de mí con tanta intensidad que giré la cara y vomité. Entonces ella me volvió a tocar y me dijo en su idioma: "Valor, busca tu valor, amigo mío". Era ella la que estaba padeciendo un gran dolor, pero pudo percibir que en ese momento yo también sufría y me dio el impulso necesario para seguir adelante.
...
Cuando se es testigo de este tipo de valor, descubres la faz más bella del ser humano.

...()...

P: ¿Ha encontrado alguna certeza?

R: Sí, la de vivir con auténtica curiosidad, dispuesto a amar y ser amado."



Joder. Luego me quejo de verme cada día más difuminado en el espejo: a ver si espabilo. Ya queda menos. Os dejo con una joya que me he encontrado en Youtube,




y con otra joya que me he encontrado en un rincón de la memoria.

Deseo - Federico García Lorca

Sólo tu corazón caliente,
y nada más.

Mi paraíso un campo
sin ruiseñor
ni liras,
con un río discreto
y una fuentecilla.

Sin la espuela del viento
sobre la fronda,
ni la estrella que quiere
ser hoja.

Una enorme luz
que fuera
luciérnaga
de otra,
en un campo
de miradas rotas.

Un reposo claro
y allí nuestros besos,
lunares sonoros
del eco,
se abrirían muy lejos.

Y tu corazón caliente,
nada más.



Que tengáis un buen día.

martes, 20 de octubre de 2009

Hoy hace 32 años...



...moría en un accidente de avión Ronnie Van Zant. Siempre dijo que no llegaría vivo a los 30, y así fue.

In memoriam. Como cada año, pido algo más de 9 minutos de silencio -- son casi 10 minutos de gloria.



Que tengáis un buen día.

domingo, 18 de octubre de 2009

Raíces, música, pecados, noches de jade y otros delirios (de un domingo por la tarde)



En mis varias parcelas de vida, me gusta rodearme de gente decente. De personas convencidas de que la verdad es la única vía. De personas que se han tomado el tiempo de constatar que vivir con arreglo a sus convicciones es algo emocionante y tierno. De personas que se plantean a cada momento la solidez de sus convicciones, dudando a cada instante de ellas y de todo en general, y a pesar de ello no vacilan en luchar por sus convicciones y de anteponerlas a cualquier cosa, incluida su propia vida.

Me gusta rodearme de personas que dudan de lo que ven sus ojos, porque a menudo tiene más sentido pensar que el verdadero sueño se produce mientras (creemos que)estamos despiertos; aunque solamente sea porque, como explicación de muchas cosas inexplicables, es la más plausible.

Supongo que el apego por la decencia y por las convicciones me viene de la falta de otras raíces que nos sean las que me proporcionan mis seres queridos. Y que el amor por la poesía y la música me viene de un cierto descreimiento que cada vez es menos pose y cada vez más algo próximo a un órgano vital. Y todo ello me lleva a la certeza de que el peor demonio lo llevamos dentro, y es el ansia de poseer, que nos lleva a la avaricia mental y material: bien pensado, debe ser uno de los pocos pecados capitales que no practico - no por nada en especial, es que no me llama.

No sé a cuento de qué viene esta reflexión, pero el caso es que han caído esta mañana en mis manos unas líneas de María Zambrano que os reproduzco:

"Comencé a cantar entre dientes por obedecer en la oscuridad absoluta que no había hasta entonces conocido, la vieja canción del agua todavía no nacida, confundida con el gemido de la que nace; el gemido de la madre que da a luz una y otra vez para acabar de nacer ella misma, entremezclado con el vagido de lo que nace, la vida parturiente. Me sentí acunada por este lloro que era también canto tan de lejos y en mí, porque nunca nada era mío del todo. ¿No tendría yo dueño tampoco?

La música no tiene dueño, pues los que van a ella no la poseen nunca. Han sido por ella primero poseídos, después iniciados. Yo no sabía que una persona pudiera ser así, al modo de la música, que posee porque penetra mientras se desprende de su fuente, también en una herida. Se abre la música sólo en algunos lugares inesperadamente, cuando errante el alma sola, se siente desfallecer sin dueño. En esta soledad nadie aparece, nadie aparecía cuando me asenté en mi soledad última; el amado sin nombre siquiera. Alguien me había enamorado allá en la noche, en una noche sola, en una única noche hasta el alba. Nunca más apareció. Ya nadie más pudo encontrarme.
"

Me gusta la idea de desvincular lo que somos de lo que tenemos. Me gusta pensar que la música, como las personas, no puede tener dueño. La pone a la altura de Dios y explica por qué, a diferencia de otras emociones, ésta no puede explicarse y sí compartirse - a poco que la escuches con alguien con quien tengas una mínima afinidad, claro.

Os dejo con dos joyas, una es Ben Webster tocando The Brute;




- la otra, Octavio Paz en estado de gracia.

REFRANES - Octavio Paz

Una espiga es todo el trigo
Una pluma es un pájaro vivo y cantando
Un hombre de carne es un hombre de sueño
La verdad no se parte
El trueno proclama los hechos del relámpago
Una mujer soñada encarna siempre en una forma amada
El árbol dormido pronuncia verdes oráculos
El agua habla sin cesar y nunca se repite
En la balanza de unos párpados el sueño no pesa
En la balanza de una lengua que delira
Una lengua de mujer que dice sí a la vida
El ave del paraíso abre las alas
Como la marejada verde de marzo en el campo
Entre los años de sequía te abres paso
Nuestras miradas se cruzan se entrelazan
Tejen un transparente vestido de fuego
Una yedra dorada que te cubre
Alta y desnuda sonríes como la catedral el día del incendio
Con el mismo gesto de la lluvia en el trópico lo has arrasado todo
Los días harapientos caen a nuestros pies
No hay nada sino dos seres desnudos y abrazados
Un surtidor en el centro de la pieza
Manantiales que duermen con los ojos abiertos
Jardines de agua flores de agua piedras preciosas de agua
Verdes monarquías

La noche de jade gira lentamente sobre sí misma.



Que tengáis un buen día.

jueves, 15 de octubre de 2009

Pieles finas

Leo con retraso en EPS dehace un par o tres de domingos (ya os digo que voy derrapando de curro) el artículo de Javier Marías que os extracto (texto completo en http://javiermarias.es/wordpressblog/)

"Parece que cada nueva generación de jóvenes tenga la piel más fina y sea más pusilánime, y que cada nueva de padres esté más dispuesta a protegérsela y a fomentar esa pusilanimidad, en un crescendo sin fin. Los adultos, luego, se alarman ante los resultados, cuando ya es tarde: se encuentran con que tienen en sus hogares a adolescentes tiránicos que no soportan el menor contratiempo o frustración; que a veces les pegan palizas (sobre todo a las madres, que son más débiles); que zumban a policías, queman coches e intentan asaltar comisarías (oye, qué juerga) porque se les impide prolongar un ruidoso botellón más allá de las tres de la madrugada, como acaba de ocurrir en la acaudalada Pozuelo de Alarcón; que, en el peor y más extremo de los casos, violan en grupo a una muchacha de su edad o más joven, como sucedió en un par de ocasiones en Andalucía hace unos meses; y que por supuesto abandonan tempranamente los estudios, cuando aún no tienen conocimientos para trabajar en nada ni –con el galopante paro– oportunidad para ello. Esos adolescentes pusilánimes y despóticos no suelen provenir de familias marginales o pobres (aunque, como en todo, haya excepciones), sino de las medias y adineradas. Son aquellos a los que se ha podido y querido mimar; si no afectiva, sí económicamente.

...()...

Mientras los niños y jóvenes se tornan cada vez más caprichosos, arbitrarios, quejicas y dictatoriales, los Gobiernos intervienen para convertir en delito el cachete que los padres solían dar a sus vástagos cuando había que ponerles límites o enseñarles que ciertos actos acarrean consecuencias y castigos, es decir, lo que todo el mundo ha de aprender más pronto o más tarde, pues, que yo sepa, los castigos no han sido abolidos en nuestras sociedades. Toda la vida se ha distinguido sin dificultad entre eso, un cachete ocasional, y una paliza en toda regla por parte de un adulto a un niño, algo condenable y repugnante para casi cualquiera que no sea el palizador. Quienes han prohibido el cachete no siempre se oponen, sin embargo, a enviar a la cárcel a menores de edad si éstos cometen un delito de consideración. Es el reino de la contradicción: a un chaval no se le puede poner la mano encima bajo ningún concepto, aunque haga barbaridades y no entre en razón (su piel es finísima), pero sí se le puede meter una temporada entre rejas para hundirle la vida y que se acabe de malear.

...()...

Nada es seguro, claro está, pero es posible que ni los violadores juveniles ni los fascistoides de Pozuelo hubieran llegado tan lejos si hubieran recibido, en anteriores fases, alguna que otra torta proporcional y hubieran aprendido a temer las consecuencias de sus actos incipientemente delictivos. El temor a las consecuencias sigue siendo –lo siento, ojalá no fuera así– uno de los mayores elementos disuasorios, también para los adultos. Hay muchos, entre éstos, que no roban ni pegan ni matan tan sólo porque saben que los pueden pillar y que les caerá un castigo. Si esto, como digo, ha de aprenderse antes o después, no veo por qué dicho aprendizaje se retrasa ahora hasta edades en las que a veces es demasiado tarde: ¿cómo va a aceptar un joven que no puede hacer esto o aquello si a lo largo de sus quince o dieciocho años se lo ha educado en la creencia de que siempre se saldría con la suya, de que a todo tenía derecho a cambio de ningún deber, y de que sus acciones más graves no acarrearían más consecuencia que el rollo que le soltaran los plastas de sus padres o profesores?

Ya sé cómo algunos leerán este artículo: como una mera reivindicación de la bofetada. Miren, qué se le va a hacer. Puestos a ser tan simplistas como esos posibles lectores, prefiero que un muchacho se lleve alguna de vez en cuando a que se lo arroje a una celda demasiado pronto, sin capacidad para entender de golpe por qué diablos está ahí, o a que viole a una compañera en manada y se vuelva a casa creyendo que eso no tiene mayor importancia que ponerse ciego de alcohol en las felices noches de botellón.
"


Menos mal que Bach estuvo unos años paseando por este mundo, y nos dejó trozos de cielo como éste.





Que tengáis un buen día.

lunes, 12 de octubre de 2009

Conectar, desconectar




Me doy cuenta que hace dos semanas que no cuelgo entradas. Lleva razón SanFreeBird72 cuando me dice que voy derrapando de curro, pero en realidad es síntoma de algo peor: de que no encuentro tiempo para desconectar de matrix, para quitarme las gafas mágicas que me permiten creer que lo que veo en el hormiguero es real.

Reacciones de supervivencia, como leer o escribir una poesía; o respirar en el silencio que sigue al final del microsurco por el que se ha deslizado la aguja del placer lenta y pausadamente, respirar dulce, lenta y acompasadamente hasta diluir todo vestigio de ansiedad y disolverse en el agua del silencio que te llena por dentro hasta que rebosa arrastrando los posos de la angustia que se pegan a la piel postiza.

Posiblemente no hace ni 6000 años que el ser humano escribe. Unos miles de años más tarde, los egipcios inventaron las primeras formas escritas de poesía, y algo más tarde los chinos la acercaron al concepto actual. Varios cientos de años más tarde nació Gabriel Celaya, quien nos dejó hace menos de 20 años dejando tras de sí poemas como éste.

Hasta la muerte - Gabriel Celaya

En el paisaje oscuro
oigo tu voz, tu voz,
tu larga voz de espesas
caricias resbaladas,
mojadas y olorosas.

La noche me suspende
en un vuelo pausado
e, inmóvil, pone en vilo
lo que el hombre no entiende:
tu voz, tu voz querida
hundiéndome en lo ausente.

Uno cierra los ojos
(¡me da miedo mirarte!);
uno tiende las manos
-aves heridas y leves-,
y en sus raíces siente
que tú eres y no eres.


Dentro de unos años me iré, como todos. Antes, quiero hacer varias cosas. Hoy he empezado a escribir mi primera novela.

Os dejo con el tercer corte de uno de los mejores discos de la historia.




Que tengáis un buen día.