miércoles, 11 de junio de 2008

No nos pertenecen

La primera referencia que tuve de Nina Simone fue a través de una campaña publicitaria que nos machacaba hace muchos años con el "My Baby Just Cares for Me".

Luego conocí más de Nina Simona, que es muuuuucho más que esa canción y que forma, junto con Sarah Vaughan, Ella Fitzgerald y Billie Holliday, el olimpo de mis grandes divas en lo que a jazz vocal se refiere -si puede llamarse jazz a su música, cosa de la que no estoy muy seguro.

Aquí la tenéis cantando la canción de Billie Holliday Don't Explain.



Tremenda canción y tremenda voz, ¿verdad?

El regalo de hoy va dedicado a todos los que, además de ser hijos, ya hemos sido padres -y a los que ya han sido padres de padres, si alguno lee esto. Es el fragmento de la obra "El Profeta" de Gibran Jalil Gibran que os transcribo debajo. Es un texto muy conocido, y aunque por internet circulan traducciones ligeramente diferentes, la que os transcribo es la que me parece que tiene más sentido.

"…()…

Y una mujer que llevaba un niño en los brazos dijo: "Háblanos de los Hijos".
Y dijo él:

Vuestros hijos no son vuestros hijos. Son los hijos y las hijas de los anhelos que la Vida tiene de sí misma.

Vienen a través de vosotros, pero no son vuestros. Y aunque vivan con vosotros, no os pertenecen.

Podéis darles vuestro amor, pero no vuestros pensamientos, porque ellos tienen sus propios pensamientos. Podéis abrigar sus cuerpos, pero no sus almas, pues sus almas habitan en la mansión del mañana, que vosotros no podéis visitar, siquiera en sueños. Podéis esforzaros en ser como ellos, pero no intentéis hacerlos a ellos como vosotros. Ya que la vida no retrocede, ni se detiene en el ayer.

Sóis los arcos con los que vuestros hijos, cual flechas vivas, son lanzados.

El Arquero ve el blanco en el camino del infinito, y Él os tensa con su poder para que sus flechas puedan volar rápidas y lejos.

Que la tensión que os causa la mano del Arquero sea vuestro gozo; ya que de la misma manera que Él ama la flecha que vuela, ama también el arco que permanece inmóvil, pero en tensión."



Los niños. Nuestros niños. Mis niños. Han nacido de quien han nacido y donde han nacido, y eso no es mejor ni peor que nacer hijo de un intocable en Jaipur (por poner un ejemplo), con una excepción: los nuestros pueden, podrán elegir, y pienso que nuestro papel es hacer todo lo que esté en nuestras manos para que sean libres a la hora de elegir. La verdad os hará libres, dice el Evangelio de San Juan: y el conocimiento, y otras cosas, pero sobre todo la capacidad de dudar y de ser crítico con uno mismo y con su exterior. Y poseer, haber desarrollado las habilidades básicas de la persona.

Libertad, albedrío, opciones vitales. Pienso que nuestra libertad para elegir -hay otra?- no puede ser algo que se nos conceda, ni por el Estado ni por los demás (lo que llamamos sociedad); en todo caso se nos reconoce como lo que es, un espacio vital y un derecho innegociable e incondicional a elegir y a equivocarnos. De eso va (o tendría que ir) la película, de pasear por el mundo sin empujar.

A ver qué tal lo hacemos. Sólo el tiempo lo dirá.

Voy a darles (a los míos) un beso de buenas noches. Buenas noches a todos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo siento, no quiero ser brasas. Me encanta leerte. Purto arte tiu!
The Gurú (también conocido como Vespaman o SanFreeBird72). Simmones es grande, ¿mi favorita? "Sinnerman", también puro arte.